GLOSARIO

Movimiento fundado por Mijaíl Lariónov (Tiraspol, Moldavia, 1881) y Natalia Goncharova (Tula, Rusia, 1881), inspirado en el choque de la luz solar sobre los objetos y su propagación radial en haces luminosos.
Basados en el conocimiento de su época sobre la percepción visual y las teorías sobre la radiación, tanto Lariónov como su mujer Goncharova pugnaron por representar espacios volumétricos sin la atadura geométrica del cubismo en boga. Aunque los primeros cuadros rayonistas de Lariónov deben ser fechados entre 1911 y 1912, no fue sino hasta 1913 cuando se dio a conocer el Manifiesto Rayonista en un panfleto publicado en el marco de la exposición La cola del asno. En él, se exaltaba la voluntad de elección del artista entre distintos fragmentos de la realidad. El rayonismo buscaba perpetuar el intersticio producido en el momento justo del entrecruzamiento de un objeto A con un objeto B; el resultado de esa colisión debía ser traducido, sobre el lienzo, en coloridas líneas que convergentes o divergentes, perpendiculares o transversales, compartían una misma fuente de luz.
Por otro lado, la defensa del uso dinámico del color para lograr la saturación, la profundidad y la textura, sobrepasan el plano meramente formal y subrayan la impronta mística que el movimiento imprimirá en otras visiones estéticas de su época, como el suprematismo.

Integrantes destacados:
Mijaíl Lariónov, Natalia Goncharova, Mijaíl Le-Dantiu (1891-1917), Alexandr Shevchenko (Járkov, Ucrania, 1882), Serguéi Romanóvich (1894-1968).
Exposiciones:
1912: La cola del asno / Moscú.

Asimilación del cubismo francés y del futurismo italiano de Filippo Tomasso Marinetti (1876-1944) que en su vertiente rusa se caracterizó por una tensión entre la descomposición del movimiento en formas cinéticas y planos superpuestos, y el colorismo tradicional ruso como reminiscencia de la representación figurativa de la realidad. El término, usado por primera vez por el crítico Kornéi Chukovski en 1913, hace referencia al surgimiento de ambos movimientos a partir de 1912 y antes de la irrupción del rayonismo y el suprematismo. Obras como Ciclista (1913) de Natalia Goncharova (Tula, Rusia, 1881), o Estudio para un retrato (1914-1915) de Liubov Popova (Ivanovskoye, Moscú, 1889) -donde se incluye el calambúr “Cub” más “futurismo”, escrito en caracteres latinos-, representan un testimonio explícito de la influencia que tuvieron ambas corrientes en la plástica rusa durante aquella primera década.
Por otra parte, la representación fragmentada del movimiento y la multiplicidad de puntos de vista frente la realidad, rasgos típicos del cubismo y del futurismo europeos, ejercerán una fuerte influencia en otras disciplinas artísticas como la literatura (ver futurismo).

Integrantes destacados:

Liuvob Popova, Natalia Goncharova, Alexandra Exter (Bialiostok, Polonia, 1882), Olga Rozánova (Melenki, Rusia, 1886), Iván Kliun (Moscú, Rusia, 1873), Alexander Arjipenko (Kiev, Ucrania, 1887), Sonia Terk (Odesa, Ucrania, 1885) y Kazimir Malévich (Kiev, Ucrania, 1897).

Propuesta nacida en el seno de las vanguardias rusas que surge en San Petersburgo (1915) con el manifiesto de Kazimir Malévich, Del cubismo al suprematismo, con motivo de la exposición 0,10 en diciembre de 1915. Manifiesto sustentado en la “primacía de la sensibilidad pura en las artes de la creación”, la “supremacía del color puro” y la no-objetividad. Grado cero de la reducción objetiva basado en la ausencia de objetos del mundo tridimensional y en la referencia a la cuarta dimensión absoluta. Destacaríamos de la exposición el cuadro de Malévich Cuadrado negro, mostrado como si fuera un icono pictórico. La reducción suprematista, situada más allá del espacio y del tiempo, rechaza el arte imitativo, representativo, expresivo e ilusionista y busca un modelo universal de la plástica.
A principios de 1920, Malévich abandonó durante un periodo de tiempo la pintura de caballete debido al propósito de trascender los límites del arte tradicional. En armonía con el postulado de la sensibilidad primordial del suprematismo, en donde todas las formas visibles deberían fusionarse, Malévich y sus discípulos transitaron de la superficie del lienzo al espacio tridimensional para explorar el diseño de objetos y la arquitectura. De esta época datan sus famosas construcciones tridimensionales conocidas como “arquitectones”.
(Ver: Unovis).

Integrantes destacados:

Kazimir Malévich, Alexandra Exter (Bialiostok, Polonia, 1882), El Lissitzki (Pochinok, Rusia, 1890) Georgy Noskov (Tver, Rusia, 1902), Ivan Kliun (Moscú, Rusia, 1873), Lev Yudin (Vitebsk, Bielorrusia, 1903), Liubov Popova (Ivanovskoye, Moscú, 1889), Nikolaí Suetin (Caluga, Rusia, 1897), Nina Kogan (San Petersburgo, Rusia, 1887), Olga Rozánova (Melenki, Rusia, 1886), Vera Ermolaeva (Kliutchi, Rusia, 1893), Xenia Boguslavskaya (San Petersburgo, Rusia, 1892).

Exposiciones:
1913: Victoria sobre el sol (ópera) / San Petersburgo. (Libreto de: Alexéi Kruchiónij; diseño escenográfico de Malévich y música de Matiushin).
1915: 0.10: última exposición futurista / San Petersburgo.

Arte basado en la autonomía de la forma artística y liberado de la representación de la realidad. Surge en 1910, cuando Kandinski (Moscú, 1866-1844) propone su primera acuarela abstracta (manchas de color dinámicamente interrelacionadas sin pretensión figurativa). En Sobre lo espiritual en el arte (1912), Kandinski desarrolló un concepto propio del artista: una suerte de místico, líder de la revolución espiritual por la que debe atravesar la sociedad de su época. Hay que concebir al artista ya no como un artesano sino como un visionario.
Miembro prominente del grupo expresionista alemán El jinete azul, se ve obligado a volver a Rusia tras estallar la primera guerra mundial y pasa a formar parte del Programa general de educación cultural impulsado por Lunacharski. En 1920 redacto el proyecto del INKHUK (Instituto de cultura artística). En desacuerdo por el rumbo ideológico tomado por el arte soviético oficial, abandona Rusia en 1921 y acepta el puesto de profesor de la Bauhaus.

En el Renacimiento surgió el cuadro de caballete, puesto al servicio de la mirada univoca y fija de un sujeto determinado (el pintor, el espectador), teniendo por contenido las siguientes determinaciones: la conversión de la pintura en arte, la perspectiva tridimensional y la voluntad de representación. Con el advenimiento de las vanguardias, dentro de las que surge destacadamente el cubismo, el poder confinante del sujeto y la lógica de la representación renacentista entran en crisis. Las vanguardias ruso-soviéticas radicalizan la propuesta cubista y rompen por completo con el lastre de la figura o del objeto reconocible en pintura. El resultado extremo de la empresa es la pintura no-objetiva (“el cero de las formas”), en la que no hay realidades reconocibles, pero hay pintura. Se trata de un despojamiento que, contra lo que pudiera pensarse, le va a permitir a la pintura, como nunca antes en la historia, servir de fondo de reserva artística en el proceso de trasformación del mundo, o dar el paso del plano al volumen (“nuevo realismo”). El erigirse en resguardo de la sensibilidad, le otorga a la pintura no-objetiva una apertura constructiva hacia el mundo de la vida. Y otra aportación de las vanguardias rusas, es consumar la pintura, realizar el último cuadro, tal como lo concibe Ródchenko. Revoluciones pictóricas que anuncian, en rigor, un nuevo inicio del arte y de las relaciones entre los hombres.
(Ver constructivismo y suprematismo).

Integrantes destacados:

Kazimir Malévich, Olga Rozánova (Melenki, Rusia, 1886), Alexandra Exter (Bialiostok, Polonia, 1882), Liubov Popova (Ivanovskoye, Moscú, 1889), Alexandr Ródchenko (San Petesburgo, Rusia, 1891), Alexandr Vesnin (Yúrievets, Rusia, 1883).

Corriente artística que despreciaba los valores tradicionales europeos y pugnó por hacer del arte un vehículo al servicio de una nueva realidad social, sobre todo a partir de la consolidación del partido bolchevique en el poder. Su primacía durante el final de la década de 1920, lo convirtió en una propuesta determinante no sólo en el rumbo de las artes plásticas, sino en la arquitectura, el cine, la música y sobre todo, en el diseño y la fotografía. En Occidente, buena parte de sus postulados teóricos habrían de ejercer una enorme influencia en la Bauhaus y el Constructivismo alemán.
Según una anécdota extensamente difundida, el adjetivo constructivista habría sido empleado por primera vez por Kazimir Malévich para referirse despectivamente a la obra de Vladímir Tatlin (Moscú, 1885). El hecho ilustra la desconfianza del fundador del suprematismo frente a la obra de Tatlin, creada a partir de materiales que hoy llamaríamos reciclados y que ponían el acento en la “factura” y el dominio de la técnica. Alejados de la preeminencia espiritual que otorgaba el suprematismo al acto creador y a partir de una visión mucho más terrenal, tanto Tatlin como Alexandr Ródchenko (San Petesburgo, Rusia, 1891) veían en el artista a un trabajador “para la vida, no para los palacios ni para las iglesias ni para los cementerios ni los museos.” Y si el suprematismo quería hacer del artista un místico, el constructivismo le devolverá su lugar entre los técnicos e ingenieros, como un obrero más al servicio de la vida y del hombre.
A pesar de estar asociado principalmente a la figura de Tatlin, el constructivismo tuvo en Naum Gabo (Briansk, Rusia, 1890) a uno de sus personajes axiales.

Integrantes destacados:
Vladímir Tatlin, Alexandra Exter (Bialiostok, Polonia, 1882), Antoine Pevsner (Klimavichy, Bielorrusia, 1886), El Lissitzki (Pochinok, Rusia, 1890), Konstantin Vyalov (Moscú, 1900), Liubov Popova (Ivanovskoye, Moscú, 1889), Varvara Stepánova (Kaunas, Lituania, 1894), Vladímir Stenberg (Moscú, 1899).

Exposiciones:
1921: Tercera exposición de la OBMOHkU (Obschestvo Molodij Judózhnikov / Sociedad de Artistas Jóvenes), con esculturas de Tatlin y Varvara Stepánova, Moscú.

Movimiento surgido a partir del constructivismo que acentúa la incorporación de la tecnología y de los materiales a los procesos de creación artísticos.
En armonía con el deseo del constructivismo de despojar la actividad artística de toda huella de misticismo y decadencia europea, dentro del productivismo se radicalizaron varios de los puntos de partida del constructivismo como la necesidad de abandonar el arte burgués de la pintura –el caso de Ródchenko es paradigmático- en favor de la industria del diseño en todas sus vertientes: editorial, escenográfico, cartel, de objetos y de ropa. Borís Arvátov (Kiev, Ucrania, 1896) y Ósip Brik (Moscú, 1888) publicaron sendos textos (¡A la producción!, 1923; Vida cotidiana y la cultura del objeto, 1925) en los que se proscribía no sólo a la pintura de caballete sino cualquier tipo de interés teórico o experimental alejado de la aplicación concreta a algún tipo de industria con un beneficio tangible para la sociedad.

Integrantes destacados:
Borís Arvátov y Ósip Brik, Alexéi Gan (Moscú, 1887) Alexandr Ródchenko (San Petesburgo, Rusia, 1891) y Varvara Stepánova (Kaunas, Lituania, 1894).

Tendencia filosófica y más tarde estética, que buscaba definir los elementos propios del arte de la clase trabajadora, libre de cualquier prejuicio burgués, académico o folclorista. Aunque algunos de sus ideólogos eran personajes sobresalientes antes de la revolución de 1917 como Alexandr Bogdánov (Sokolka, Polonia, 1873) y Máximo Gorki (Nizhni Novgórod, Rusia, 1868), no fue sino hasta la consolidación en el poder del partido soviético que dejó de ser un movimiento espontáneo para convertirse en una política pública. A partir de entonces, surgieron diversos talleres artísticos producto del entusiasmo de los ciudadanos por participar en la reconstrucción del Estado, en los que solía enseñarse dibujo, actuación y composición literaria; además se discutían los caminos que debía seguir el arte ruso para evitar quedarse rezagado ante la revolución política y social circundante.
Muy pronto este nuevo tipo de humanismo proletario despertó el interés del partido comunista y de su dirigente Vladímir Lenin quien luego de nombrar a Anatoli Lunacharski jefe del sistema educativo del estado Narkompros (Comisariado Popular de Educación Pública), mandó regular la serie de talleres artísticos y círculos intelectuales que habían surgido en torno a la Proletkut. A partir de entonces existiría una tirantez creciente entre la libertad intelectual que demandaban los centros del Proletkult y los objetivos específicos que de acuerdo con el Estado debían cumplirse.
Ejemplos de la ética y estética de la Proletkult son los primeros trabajos de Serguéi Eisenstein (Riga, Letonia, 1898), particularmente Huelga (1924) y El acorazado Potemkin (1925).

Integrantes destacados:
Alexandr Bogdánov, Máximo Gorki, Serguéi Eisenstein.

Movimiento que postulaba la primacía de la funcionalidad en la creación artística, en un contexto político radical en el que debía privilegiarse el rol del arte como un agente educativo entre las clases populares. De esta manera, el arte realista-socialista resultará clave en la estrategia propagandística del partido comunista bajo cuatro ejes: orientación hacia el pueblo (naródnost), forma ideológica (ideonost), contenido de clase (klássnost) y el estímulo en la clase trabajadora del verdadero espíritu del comunismo (patriótnost). La idealización del obrero como un héroe común, de su vida cotidiana como hazaña y de los líderes del partido como gigantes de la paz y del progreso, encontrarán su mejor técnica expresiva en cierto descriptivismo de corte realista y la vuelta a la imitación de pintores tradicionales rusos como Ilyá Repin (1844-1930) y Vasili Surikov (1848-1916).
Bajo la vigilancia de Andréi Zhdánov jefe de propaganda de Stalin, y ante la creciente desconfianza de las clases dirigentes en toda manifestación artística de vanguardia asociada a la decadencia del arte burgués en Occidente, el realismo socialista pondrá fin a la ebullición de movimientos y asociaciones artísticas y sus búsquedas ‘formales’ –o formalistas según el discurso oficial—y sobrevivirá como la única estética verdadera por más de cincuenta años.

Integrantes destacados:
Alexandr Gerásimov (Kozlov, Rusia, 1881), Alexandr Deineka (Kursk, Rusia, 1899), Serguéi Maliutin (Moscú, 1859), Borís Yoganson (Moscú, 1893), Kuzmá Petrov-Vodkin (Javalinsk, Rusia, 1878).

Asociación de artistas creada con motivo de una histórica exposición en Moscú donde fueron reunidas obras de algunos cubistas franceses de renombre junto al trabajo de algunos ex-alumnos expulsados de la Escuela de Pintura de Moscú, entre ellos, Aristarj Lentulov (Nizhni-Lomov, Rusia, 1882). Uno de los objetivos de la sociedad era la difusión de las vanguardias europeas en Rusia, para lo cual fueron organizadas seis exposiciones, la última de ellas en 1917.
Ciertas discrepancias en cuanto al grado de apego e importancia que debía otorgarse a la tradición europea por encima de las temáticas propiamente rusas surgieron entre sus integrantes que habría de culminar en la salida de algunos de sus miembros.
(Ver: La Cola del Asno).

Integrantes destacados:
Aristarj Lentulov, P. Konchalovski (Járkov, Ucrania, 1876), Ilya Mashkov (Volgograd, Rusia, 1881), Vasili Rozhdestvenski (Tula, Rusia, 1884) y Alexandr Kuprin (Navrovchat, Rusia, 1870), Mijaíl Lariónov (Tiraspol, Moldavia, 1881) y Natalia Goncharova (Tula, Rusia, 1881).

Exposiciones:
1910: Sota de diamantes / Casa Levinson, Moscú. Entre los artistas franceses que participaron estaban: Henri Le Fauconnier, André Lhote, Albert Gleizes y Jean Metzinger.

Sociedad artística formada a partir de la escisión del grupo Sota de Diamantes, luego de desacuerdos en el seno del grupo. La promotora central del debate, Natalia Goncharova (Tula, Rusia, 1881), rechazaba el predominio de tendencias burguesas y decadentistas de varios miembros del grupo, en detrimento de la búsqueda de un arte propiamente ruso. Mijaíl Lariónov (Tiraspol, Moldavia, 1881) bautizó a la nueva agrupación como Cola del asno luego de haber leído un artículo sobre un estudiante francés que había mostrado una pintura en el Salón de los Independientes en París, tras atar un pincel a la cola de un asno como método para confeccionarla.
Aunque el grupo exhibió una sola vez, su influencia en la revitalización de los elementos primitivos y religiosos del arte tradicional ruso como punto de partida de movimientos posteriores resultaría a la postre, determinante.

Integrantes destacados:
Mijaíl Lariónov, Natalia Goncharova, Kazimir Malévich (Kiev, Ucrania, 1897), Marc Chagall (Vitebsk, Bielorrusia, 1877) y Alexander Shevchenko (Moscú, 1883).

Grupo formado hacia finales de la década de 1920 y que incluyó a más de un centenar de miembros dentro de sus filas, entre ellos el mexicano Diego Rivera. Destacan además, algunos pioneros del uso del fotomontaje y el collage en el arte fotográfico, fuertemente adheridos a los postulados de constructivismo, como Gustav Klutsis (Rujenia, Letonia, 1895) y Alexandr Ródchenko (San Petesburgo, Rusia, 1891). La fuerza de este núcleo, dio pie a su separación con el objetivo de crear una asociación propia, dedicada exclusivamente a la fotografía, conocida a la postre como el “Fotogrupo independiente Octubre”.

Miembros destacados:
Gustav Klutsis, Alexandr Ródchenko, Serguéi Eisenstein (Riga, Letonia, 1898), El Lissitzki (Pochinok, Rusia, 1890), Eleazar Langman (Odesa, Ucrania, 1895) y Borís Ignátovich (Lutsk, Ucrania, 1899).

Revista auspiciada por el gobierno ruso y dirigida por el poeta Vladímir Maiakovski (Bagdadi, Georgia, 1893) y el crítico Ósip Brik (Moscú, 1888) cuyos años iniciales coinciden con la consolidación del constructivismo y su posterior radicalización hacia la izquierda, conocida como productivismo. En sus páginas se publicaron algunos manifiestos y documentos fundacionales de la teoría de los movimientos vanguardistas rusos. El diseñador principal de sus arriesgadas portadas –algunas de ellas fotomontajes memorables- fue Alexandr Ródchenko (San Petersburgo, Rusia, 1891).

Colaboradores destacados:
Ósip Brik (1988-1945) Vladímir Maiakovski (Bagdadi, Georgia, 1893), Isaak Bábel (Odesa, Ucrania, 1894), Víktor Shklovski (San Petersburgo, 1893), Vsévolod Meyerhold (Penza, Rusia, 1874), Borís Pasternak (Moscú, 1890), Liubov Popova (Ivanovskoye, Moscú, 1889), Varvara Stepánova (Kaunas, Lituania, 1894), Dziga Vértov (Bialystok, Polonia, 1896), y Serguéi Eisenstein (Riga, Letonia, 1898).

Agrupaciones de arquitectos surgidas de la planta docente y estudiantil que en los VKhUTEMAS formó parte de los talleres dedicados a la arquitectura y el diseño, principalmente. El primer grupo tuvo en Nicolái Ladovski (Moscú, 1881), a uno de sus pilares. Fundador del racionalismo, Ladovski habría entendido la importancia de la percepción psicológica en la percepción de la arquitectura como un arte racional. Mediante un método pedagógico conocido como “el cuarto obscuro”, basado en la experimentación del ritmo, proporción, color, dinámica, masa y peso, logró transmitir entre sus discípulos la importancia de la construcción de espacios afectivos y estéticamente habitables.
Los principios racionalistas de la ASNOVA chocaban con la primacía de la función arquitectónica defendida por los miembros de OSA y su líder Moisei Ginzburg (1892 -1946). Su visión cientificista –casi geométrica– de la arquitectura, derivaba de la idea que tenía el Constructivismo sobre el arte no como material de belleza sino como método de organización social y vital. Aunque muchos de los proyectos de la OSA no se materializaron más allá de sus planos, tanto del estudio de sus bocetos como de los edificios que nos sobreviven se puede concluir que la economía de las formas, la incorporación de materiales estructurales como el cristal o el metal, y la preocupación por priorizar un sentido general y pragmático de los asentamientos urbanos, son las características principales de la integración del Constructivismo a las ideas sobre la arquitectura de la OSA.

Miembros destacados de ASNOVA:
El Lissitzki (Pochinok, Rusia, 1890), Konstantín Mélnikov (Moscú, 1890), Bertold Lubetkin (Tiflis, Georgia, 1901), Georgi Krutikov (Voronezh, Rusia, 1899).

Miembros destacados de OSA:
Moisei Ginzburg, Alexéi Gan (Moscú, 1887), Iliá Gólosov (Moscú, 1883), Iván Leonídov (Tver, Rusia, 1902), Alexander Ródchenko (San Petesburgo, Rusia, 1891).

Movimiento estético y cinematográfico representado en una serie de filmaciones y artículos teóricos elaborados por el cineasta Dziga Vértov (Bialystok, Polonia, 1896). El Cine-verdad estaba sustentado en los postulados del Kino glaz (Cine-ojo) que pretendía hacer que el operador de la cámara se fusionara con la mirilla del aparato mismo. De esa manera se alcanzaba no sólo una visión objetiva sobre la realidad, sino que se permitía a la vida misma penetrar a través de la lente de la cámara. De acuerdo con el Kino glaz, la única escenografía válida era la calle, el único guion los acontecimientos de la vida diaria y sus actores, los habitantes naturales de la ciudad. Desde el punto de vista técnico, el objetivo era conseguir una cierta ‘visión aumentada’, gracias a posibilidades formales inalcanzables para el ojo humano, ya fuera por su velocidad (congelamiento, aceleración o ralentización de la imagen), por su simultaneidad (sobreimposición y fusión de la imagen) o por la inusitada colocación de la cámara misma (a ras de suelo para captar desde los rieles, la llegada de un tren). Sin imposturas teatrales y a contracorriente del cine premeditado de Eisenstein, Vértov puso en práctica tres valores fundacionales del constructivismo: la primacía de lo real sobre la ficción, la implementación de una mirada industrial alejada de todo horizonte romántico y burgués, y la superación de un punto de vista unívoco y objetivo de la realidad.
Las obras del Cine-verdad fueron ampliamente difundidas entre los círculos del cine documentalista occidental de manera que tanto Jean Rouche como Jean-Louc Godard dejaron constancia de su impronta en los movimientos Cinéma Verité (Cine verdad / ca. 1958) y Groupe Dziga Vértov (Grupo Dziga Vértov / 1968), bautizados expresamente en homenaje al creador del Kino pravda.

Integrantes destacados:
Dziga Vértov, Elizabeta Svilova (Moscú, 1900) y Mijaíl Kaufman (Bialystok, Polonia 1897)
Obras: El hombre de la cámara (Cheloveks Kinoapparatom), 1928; Cine-ojo (Kinoglaz), 1924.

Sociedad formada por distintos herederos de la intelligentsia rusa, durante el final de la época zarista. Algunos de sus miembros -tachados por generaciones posteriores de académicos y europeizantes- resultarían a la postre figuras clave en la consolidación de San Petersburgo y Moscú como escenarios culturales cosmopolitas, aunque con fuertes reminiscencias de diversas tradiciones nacionales rusas. Mediante una revista especializada y frecuentes exposiciones bajo el mismo nombre, el círculo de El mundo del arte introdujo algunos episodios recientes del arte occidental entre el público y la sociedad artística de entre siglos, como el impresionismo francés, el simbolismo alemán o el art déco de raigambre vienés. Apellidos como los de Cézanne, Matisse, Puvis de Chavannes o Bonnard, centrales en la germinación del horizonte intelectual de las vanguardias rusas, fueron ampliamente discutidos y admirados por sus afiliados.
Una figura clave de la sociedad, cofundador de la revista e incansable promotor cultural ruso fue Serguéi Diáguilev (Nóvgorod, Rusia, 1872). Gracias a su visión empresarial y sensibilidad artística, Diáguilev impulsó exposiciones, veladas musicales y puestas en escena –mención aparte merece su iniciativa más exitosa, la de los Ballets Rusos– que contribuyeron decisivamente a lo que el crítico John E. Bowlt ha llamado “el matrimonio entre Rusia y Occidente”. Gracias al puente tendido por Diáguilev, músicos como Serguéi Prokófiev, Ígor Stravinski, la pareja de pintores Mijaíl Lariónov (Tiraspol, Moldavia, 1881) y Natalia Goncharova (Tula, Rusia, 1881), o los directores de arte Lev Bakst y Alexandr Benois –cofundadores de El mundo del arte-, por no mencionar a los bailarines Anna Pávlova y Vatslav Nijinski, encontraron reconocimiento y refugio en la Europa occidental.

Miembros destacados:
Serguéi Diáguilev, Dmitri Filosófov (San Ptersburgo, 1872) Lev Bakst (Girodno, Bielorrusia, 1866), Konstantín Somov (San Petersburgo, 1869), Alexandr Benois (San Petersburgo, 1870).

Exposiciones relevantes:
1898: Exposición de arte ruso y finlandés, San Petersburgo.
1906: Sección rusa del “Salon d’Automne”, París, con una selección que incluía desde íconos bizantinos, maestros del siglo XVIII y XIX, así como trabajos de los jóvenes Mijaíl Lariónov, Natalia Goncharova y Pável Kuznetsov (1878-1968).

Taller de actuación creado en San Petersburgo (entonces rebautizado como Petrogrado) con la intención de desligar del oficio actoral las prácticas asociadas por la comunidad artística bolchevique con el arte impostado del teatro burgués. La FEKS entonces volvió la mirada a técnicas actorales provenientes del circo o el cabaret, pero sobre todo, puso en práctica diversas teorías del universo conceptual de la Rusia de 1920 que apuntaban hacia la mecanización de los movimientos corporales. En ese sentido, los proyectos fílmicos de la FEKS son testimonios que integran la teoría biomecánica del actor y director Vsévolod Meyerhold (Penza, Rusia, 1874) y su método de entrenamiento actoral. Incluso el propio Seguéi Eisenstein, en los inicios de su carrera como director de teatro, absorbió algunos de estos postulados, principalmente, el efecto de comicidad y sorpresa alcanzado por el trucaje, la exageración o falta de voluntad de los gestos en el escenario.

Integrantes destacados:
Grigori Kozintsev (Kiev, Ucrania, 1905), Serguéi Yutkévich (San Petersburgo, Rusia, 1904) y Leonid Trauberg (Odesa, Ucrania, 1902).
Filmografía: Las aventuras de Octobrina (Pokhojdenia Oktiabriny) de Leonid Trauberg y Grigori Kozintsev en 1924

Agrupación literaria conformada por varios miembros del grupo Guileya cuyo manifiesto Una bofetada al gusto público de 1912, es considerado un punto de ruptura con la tradición y uno de los gestos fundacionales de las vanguardias rusas. Aunque comparte la fascinación por la modernidad y el progreso del también futurismo italiano, el grupo conformado alrededor de la figura de Vladímir Maiakovski (Bagdadi, Georgia, 1893) buscó singularizarse gracias a sus extravagantes apariciones en público, la mayor parte de las veces, convertidas en escándalos deliberados.
En materia literaria cultivaron los juegos de palabras, las audacias semánticas y la primacía de la sonoridad del lenguaje, subordinando el sentido lingüístico a la forma verbal.

Integrantes destacados:
Vladímir Maiakovski, Velimir Jlébnikov (Derbeti, Rusia, 1885), Alexéi Kruchiónij (Olevka, Ucrania, 1886), David Burliuk (Lebedin, Ucrania, 1882).

Sociedad artística y publicación periódica auspiciada por el mecenas Levki Zheverzheiev, donde convergieron por primera vez el trabajo de jóvenes artistas provenientes tanto de Moscú como de San Petersburgo. Sus exhibiciones, llevadas a cabo cada dos años, sirvieron como plataforma de lanzamiento para artistas como Olga Rozánova (Melenki, Rusia, 1886), Pável Filónov (Moscú, 1883) y Mijaíl Lariónov (Tiraspol, Moldavia, 1881).
En 1913, el grupo integró la vertiente literaria del futurismo ruso (Гилея /Guileya), liderado por David Burliuk, Velimir Jlébnikov y Vladímir Maiakovski (Bagdadi, Georgia, 1893), responsables del famoso manifiesto: Una bofetada al gusto público, de 1912. Desde entonces, fueron frecuentes las conferencias de corte futurista –con recitales y paseos por las calles con llamativas indumentarias de parte de los participantes- así como algunas legendarias puestas en escena, la más turbulenta de ellas, Victoria sobre el sol (1913), con libreto de Kruchiónij, música de Matiushin y arte de Kazimir Malévich.

Integrantes destacados:
Mijaíl Matiushin (Nizhni-Nóvgorod, 1861), Elena Guro (San Petersburgo, 1877), David Burliuk (Lebedin, Ucrania, 1882), Vladímir Burliuk (Járkov, Ucrania, 1886), Kazimir Malévich (Kiev, Ucrania, 1897), Pável Filónov (Moscú, 1883), Vladímir Tatlin (Moscú, 1885), Iván Kliun (Moscú, Rusia, 1873), Iván Puni (Repino, Rusia, 1892), Nadezhda Lérmontova (San Petersburgo, 1885), Alexandra Exter (Bialiostok, Polonia, 1882), Nadezhda Udaltsova (Oriol, Rusia, 1886), Natan Altman (Vinytsia, Ucrania, 1889).

Exposiciones relevantes:
Primera exposición llamada Los impresionistas, San Petersburgo: 1909.
Aunque el grupo no se había constituido como tal, fue la primera vez que se reunieron aquellos que serían los fundadores Mijaíl Matiushin y Elena Garo cuya casa serviría como base de reuniones del grupo.

Institución educativa fundada por decreto de Vladimir Lenin en 1920 que buscaban servir como un centro de enseñanza de las nuevas tecnologías aplicadas a las artes. Sobre la fundación de los Vkhutemas que fusionó a la antigua Escuela de Pintura, Escultura y Arquitectura de Moscú con la Escuela de Artes Aplicadas de Estroganov en distintas facultades y talleres, descansaba la aspiración de artistas y gobernantes de hacer del arte un campo de conocimiento aplicado, con un claro beneficio para la nueva sociedad revolucionaria.
Esta pretensión coincidía con los postulados de varios artistas de la época por lo que las figuras más relevantes de las vanguardias rusas –Malévich, Ródchenko, Lissitzki, Popova, entre otros— aceptaron formar parte de la planta docente de los Vkhutemas. Bajo la modalidad de talleres libres, los VKhutemas funcionaron como auténticos laboratorios en los que tanto alumnos como maestros buscaban borrar los límites del arte tradicional, saltando de la pintura de caballete al dibujo, de la arquitectura al diseño escenográfico o de la escultura al diseño industrial, en un ambiente verdaderamente independiente y multidisciplinario. Dentro y fuera de sus aulas, se habrían de escenificar varias de las batallas ideológicas que marcarían las rupturas y disonancias entre suprematismo y constructivismo, entre constructivismo y productivismo, y más tarde, entre estos tres y el realismo social.
Integrantes destacados de la planta docente: Liubov Popova (Ivanovskoye, Moscú, 1889), Alexandr Ródchenko (San Petersburgo, 1891), Alexandra Exter (Bialiostok, Polonia, 1882), Kazimir Malévich (Kiev, Ucrania, 1897), Nicolái Ladovski (Moscú, 1881).

Asociación formada con el objetivo de difundir la música de vanguardia en territorio ruso y fundada por el músico Nikolái Roslavets (Surazh, Rusia, 1881). Tuvo que enfrentar la fuerte oposición de la Asociación de Músicos Proletarios de Rusia (RAPM), integrada por compositores como Lev Lebedinski debido a su admiración por la música occidental y a su tendencia a la experimentación formal.

Miembros destacados:
Dmitri Shostakóvich (San Petersburgo, 1906), Vissarion Shebalin (Omsk, Rusia, 1902), Alexandr Mosólov (Kiev, Ucrania, 1900), Gavril Popov (Novocherkask, Rusia, 1906)

Agrupación que promovía las artes mediante un circuito descentralizado de exhibiciones y talleres de enseñanza no sólo en las grandes ciudades, sino en los poblados más remotos del territorio ruso. En su declaración de principios se establecía como una de sus principales temáticas y fuentes de inspiración al Ejército rojo, los campesinos, los héroes revolucionarios y los trabajadores.
Particularmente a partir de 1928 cuando simplificó su nombre por el de Asociación de Artistas de la Revolución y hasta antes de su disolución, chocó con grupos como el suprematismo o el constructivo que, según denunciaban, parecían abstraídos en reflexiones formalistas, ajenas a los ideales de pragmatismo y democracia de la Revolución Rusa.

Miembros:
Evgeni Katzman, Isaak Brodski, Yuri Repin, Alexandr Grigóriev, Pável Radimov, Abram Archipov, Alexandr Makovski, Nikolái Kasatkin y Konstantín Yuon.

Exposiciones relevantes:
1922: Exhibición de las AKhRR en pro de los pueblos hambrientos del Volga (1ª exposición del grupo).

Teoría pictórica elaborada y llevada hasta sus últimas consecuencias por Pável Filónov (Moscú, 1883), según la cual para expresar la complejidad del universo era necesario partir del estudio interno y mínimo de sus elementos. Aunque en la práctica, los mejores ejemplos de arte analítico comparten con el cubismo y el futurismo la multiplicidad de facetas asignadas a la realidad –traducida en el lienzo en una diversidad de planos y puntos focales—Filónov, a partir de una visión intimista, rechazó ambos movimientos acusándolos de quedarse estancados en los elementos superficiales de la representación. Al contrario, su obra buscaba dotar al lienzo de un sentido de ‘flujo interior’, mediante un método de descubrimiento de los mecanismos internos de la naturaleza, como las partes de un reloj que son indiscernibles a simple vista pero que determinan las partes visibles de su forma externa.

Integrantes destacados:
Pável Filónov, Tatiana Glebova (1900, San Petesburgo, Rusia), Andréi Sashin (1895, Smolensk, Rusia), Inokenti Suvorov (1898, Irkutsk, Rusia), Sofía Zaklikovskaia (San Petesburgo, 1899).